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(Diario Crítico) He oído decir que hay dos tipos de economistas, los que no tienen ni idea de cómo superar la crisis y los que aún saben menos. Y el Gobierno presenta un presupuesto que por lo que hemos entendido se basa en aumentar los impuestos, a lo que, independientemente de la descalificación global que hizo Mariano Rajoy, definiéndolas como letales para la economía española, sin embargo J.A. Duran i Lleida, como portavoz de CiU, fue bastante más preciso y propuso específicamente apoyar la creación de 100.000 empleos, lo que ahorraría al Estado 1.300 millones de euros en prestaciones y aportarían 850 millones en impuestos, y ello daría mucho más que aumentar 2 puntos el IVA a partir de Julio.
(Diario Crítico) He oído decir que hay dos tipos de economistas, los que no tienen ni idea de cómo superar la crisis y los que aún saben menos. Y el Gobierno presenta un presupuesto que por lo que hemos entendido se basa en aumentar los impuestos, a lo que, independientemente de la descalificación global que hizo Mariano Rajoy, definiéndolas como letales para la economía española, sin embargo J.A. Duran i Lleida, como portavoz de CiU, fue bastante más preciso y propuso específicamente apoyar la creación de 100.000 empleos, lo que ahorraría al Estado 1.300 millones de euros en prestaciones y aportarían 850 millones en impuestos, y ello daría mucho más que aumentar 2 puntos el IVA a partir de Julio.
La calificación de la política económica del Gobierno, al estilo marinero, como una nave sin rumbo, diciendo al capitán que es hora de virar, y si no sabe que se busque a un nuevo piloto que sepa hacerlo. Enhorabuena, pues el Debate fue penoso por parte de Elena Salgado, sin las tablas necesarias para defender lo indefendible, en tanto Rajoy la ninguneaba, refiriéndose a Zapatero en sus contestaciones.
De otra parte, está el problema de fondo, ¿son creíbles esos presupuestos? Dadas las circunstancias actuales, ¿se recaudarán los impuestos previstos para equilibrar el Presupuesto?, o más bien ni el Gobierno se cree lo que ha puesto en ellos. Esto se llama prevaricación, si se dicta una decisión que se sabe que es falsa a sabiendas, ¿a quién quieren engañar?, a todos los españoles. Y encima con el apoyo del PNV, ¿qué le habrá sacado al Gobierno? La semana pasada el PNV se manifestaba a favor de la izquierda abertzale, y por tanto carece de toda legitimidad para apoyar unos presupuestos que ni les van ni les vienen, pues el concierto vasco está ya blindado.
Lo peor es que Elena Salgado no fue aplaudida ni por la “bancada” socialista, a veces ni siquiera un tercio o la mitad, frente a las protestas de los populares.
Todo el mundo sabe que Elena Salgado no pinta nada, y que el único ministro de Economía es Zapatero, que se quitó de encima a Solbes, y ahora quiere quitarse a todos sus críticos: Solchaga, Miguel Angel Fernández Ordoñez, etc.
Lo malo es que cuanto más habla menos se le cree, y esto si que es “letal” para las empresas y la economía en general. No hay nada peor que el miedo y la desconfianza para el dinero, que cuando barrunta el peligro, sale corriendo, y es precisamente el no creer en lo que dice el Gobierno, lo que más perjudica a la economía. Se trata de reacciones psicológicas de “masas”. “Que viene el lobo”, ya no le cree nadie, y este no creer hace peligrar si cabe un aún más el futuro de la economía.
Mentiras tan grandes como decir que el PIB crecería un 1%, con un balance final de -3’6, o que se destruirían sólo 100.000 puestos de trabajo, cuando han sido 1.200.000, o la gran patraña denominada Economía sostenible, es adjetivar la Economía con una metáfora, porque podría ser economía, social, progresista, motivante, de esfuerzo, prometedora, de crecimiento, etc., y mil adjetivos más, que no quieren decir absolutamente nada. La realidad es triste y este 2010 el PIB puede bajar 10 puntos, lo que sería ya la hecatombe.
Más impuestos, menos consumo, menos negocio, más paro, y además dudo mucho que con ello consiga parar el déficit, pues la recaudación se ha ido por los suelos, y eso que por ahí andan unos Inspectores de Hacienda, diciendo que pueden recaudar 100.000 millones, mucho me temo que el dinero se va a esconder debajo de los ladrillos y cemento, ante el peligro de una jauría desatada de inquisitoriales Inspectores de Hacienda, a los que se les tendrá más miedo que a la propia crisis.
Pobres empresarios. Esto se llama acoso económico y violencia de género contra el ahorrador y el inversor. ¡Menudo futuro 2010!
Bernardo Rabassa Asenjo
Sociólogo
Presidente del Club Liberal Español
Premio 1812 (2008)
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