jueves, 15 de mayo de 2008

NOTICIAS ENTRELAZADAS

La tontería es infinitamente más fascinante que la inteligencia.
La inteligencia tiene sus límites, la tontería no.

No podríamos estar más de acuerdo con el artífice de esta frase: monsieur Claude Chabrol. El director francés -reconocido mundialmente por su dominio para diseccionar el lado más oscuro del ser humano-, estrena estos días nueva película: Una chica cortada en dos. En ella, entre otras cosas, se habla de la “corrupción” sentimental, de las sucias tretas que algunos (los que se miran el ombligo) suelen utilizar para engañar y manipular a su antojo al resto (los ingenuos).

Precisamente, así son los nacionalistas: "ombliguistas" y manipuladores. Continuamente encontramos ejemplos en la prensa de cómo van introduciendo sus ideas en el resto de la sociedad. Hoy mismo, sin ir más lejos, tenemos las siguientes:

El Parlamento aprueba el apoyo a los comercios que rotulen en gallego

PSOE y BNG sacan adelante la iniciativa que valora el uso del gallego de cara a las ayudas oficiales


EL PAIS. El Parlamento gallego ha aprobado hoy, con los votos a favor de los diputados del PSdeG y del BNG y el rechazo del PPdeG, una iniciativa en la que reclama a la Xunta que incorpore "la implicación de las empresas en el uso del gallego" como un criterio en la concesión de ayudas públicas a los comercios o de los contratos de estos con la Administración. En esa línea, la Cámara también reclama que en todas las ayudas se introduzca "una cláusula de promoción del gallego". Asimismo, la proposición apuesta por incentivar la rotulación interior y exterior en gallego y por fomentar el desarrollo de acciones de información y asesoramiento dirigidas a comerciantes, asociaciones y entidades del sector.

ABC. El BNG, de la mano del diputado Bieito Lobeira, traslada hoy al pleno del Parlamento de Galicia una proposición no de ley para que la rotulación interior y exterior de cada uno de los 43.000 comercios existentes en la comunidad, así como la información disponible para los clientes, esté en gallego, como mínimo.
Este grupo tiene la deferencia de decir que, en función de la cooficialidad, podría haber también inscripciones en castellano. Los nacionalistas aseguran que esta medida de la Consejería de Industria, controlada por sus siglas, no supone una imposición, pero a la vez dejan claro que el empleo de la lengua propia podría ser reconocido como mérito a la hora de recibir ayudas públicas en las convocatorias oficiales que realice el Ejecutivo.
Con estas y otras iniciativas, el Bloque, como en Cataluña, pretende revocar la normalización del español, en un sector que da empleo a 114.000 personas y mueve un 13 por ciento del PIB en esta autonomía. En palabras del parlamentario Bieito Lobeira, «esta práctica habitual de empleo del castellano remite a una imposición histórica del idioma; y es lamentable que en la actualidad todavía existan rebajas hacia el gallego, pues algunas personas siguen identificando el castellano con la modernidad, el dinero y la innovación».
Los socialistas, socios del BNG, consienten con su permisividad esta nueva salida del BNG con su sectaria Ley del Comercio. El PSOE descarta referirse a obligaciones, y dice que se trata de «promover», simplemente. El PP se opone de forma contundente a esta propuesta.

... y también Ciudadanos se opone, aunque todavía no tengamos parlamentarios en la Xunta.

Así se empezó en Cataluña hace años, y ahora se multa a quien no rotule en catalán, y lo haga en la otra lengua co-oficial, como es el castellano. En Ciudadanos defendemos el derecho de los comerciantes a rotular su negocio en el idioma oficial que quieran, sean gallegos, catalanes, vascos, o mallorquines. Al fin y al cabo, todos tenemos un idioma común, y lo usamos para comunicarnos, no para establecer barreras idiomáticas entre españoles. Ahora bien, cuando se empiezan a poner prohibiciones, el riesgo que corremos es que se llegue al absurdo, como en el caso de estos comerciantes en Baleares:


UNA TIENDA BALEAR PROHIBIA LA ENTRADA A "PERROS Y RUMANOS"

EL PAIS. Una tienda de informática del municipio mallorquín de Alcúdia ha exhibido durante varios días un cartel que prohibía la entrada a "perros y rumanos". El letrero fue retirado el pasado fin de semana por la Policía Local.
Una encargada de la franquicia Beep de Alcúdia, en la que fue colocado el cartel, aseguró que la decisión de ponerlo respondió a un "calentón" de los propietarios, que estaban "hartos" de sufrir robos de personas de la citada nacionalidad. La cadena Beep ha pedido disculpas y se ha desmarcado de la "presunta actuación xenófoba".

Hoy mismo, en el Congreso de los Diputados, a petición del grupo popular, y para sorpresa de todos los demás, se ha presentado una propuesta no de ley que pretende garantizar el derecho de todos los ciudadanos españoles a estudiar en castellano, con independencia de la comunidad en que residan. ¿En qué país del mundo podríamos imaginar que una propuesta que pretenda garantizar el derecho de sus ciudadanos a estudiar en su idioma sea despreciada, como ha sido hoy la del PP?

El Congreso avala otra vez la inmersión lingüística en catalán


EL PERIÓDICO
MADRID

El PP demostró ayer fehacientemente en el Congreso que el giro moderado que quiere impulsar Mariano Rajoy no altera sus planteamientos políticos. Como ya hicieran, sin éxito, en el 2006, los populares llevaron al pleno una proposición no de ley con la pretensión de que la Cámara baja defendiese el derecho de todos los ciudadanos a "estudiar en castellano en todas las etapas del sistema educativo". Pero el Congreso volvió a rechazar la iniciativa, apoyando de ese modo la política de inmersión lingüística que se practica en Catalunya desde hace más de dos décadas.
El popular Alfonso Alonso, exalcalde de Vitoria, defendió "garantizar el principio de igualdad" entre todos los españoles y combatir el "nacionalismo ciego" que, según sus palabras, en Catalunya y Euskadi "impone" las lenguas cooficiales y "arrincona" el castellano. El portavoz del PP defendió un "bilingüismo equilibrado e integrador" tanto en los colegios como en el acceso a la Administración.
En nombre del PSOE, Meritxell Batet (PSC) denunció el espíritu "homogeneizador e igualitarista" del PP, al que acusó de confundir "igualdad y uniformidad". "Les falta evolución", afirmó. Jordi Xuclà (CiU) sostuvo que "no hay nada más injusto que tratar de forma igual realidades distintas" y Joan Ridao (ERC) culpó a los populares de ofrecer su faz "más intransigente". Rosa Díez, de Unión Progreso y Democracia, no apoyó la iniciativa por juzgarla tibia.


(continuará)

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